Constituido en la capital el Consejo de la Economía Social y Solidaria

Readacción. El Consejo Consultivo de la Economía Social y Solidaria de la ciudad de Madrid celebró el pasado martes su primera sesión. Representantes de las Administraciones Públicas, organizaciones y profesionales del sector, y expertos académicos son miembros permanentes de este órgano, que responde a la apuesta del Ayuntamiento de Madrid por promover y fortalecer la economía social como un sector básico para el desarrollo equilibrado y la cohesión de la capital.

La economía social y solidaria implica una visión de la empresa basada en el bien común, sin renunciar a la eficacia profesional y a la sostenibilidad económica. Apuesta por una gestión participativa, por la responsabilidad social y el desarrollo sostenible.

El concejal de Economía y Hacienda, Carlos Sánchez Mato, ha presidido la sesión constitutiva del Consejo, cuyas principales funciones son colaborar y asesorar en la realización de actuaciones que contribuyan a un mayor conocimiento de la economía social  y solidaria, su realidad y su potencialidad en la capital; a canalizar las necesidades y demandas del sector; al diseño y puesta en marcha de iniciativas que fortalezcan la economía social, y a trabajar con el Ayuntamiento de Madrid en la definición e implementación de acciones que incidan el desarrollo económico y la creación de empleo.

La economía social y solidaria se ha situado en la agenda de los entes locales por su capacidad para garantizar un progreso vinculado a la creación de empleo de calidad sustentado en el impulso de un tejido productivo con base en una economía de proximidad.

El Ayuntamiento de Madrid ha planteado en esta primera reunión del Consejo la puesta en marcha de un paquete de actuaciones en los próximos meses, en los que se inculye: elaborar un Plan estratégico de la economía social y solidaria; apoyar a proyectos concretos de dinamización en los distritos de Centro y Villaverde; establecer un paquete de medidas financieras que propicien y faciliten la financiación de las empresas de la economía social en el conjunto de la ciudad; instaurar un conjunto de líneas de subvención para mejorar la capitalización de las empresas; favorecer la cristalización de proyectos preferentemente de contenido social; contribuir a la puesta en marcha de proyectos empresariales de cooperación y consolidar la representatividad de la economía social madrileña; y por último, crear la Oficina de apoyo a la economía social.